Estas son
algunas de las tradiciones judías (que encontramos) con respecto al dinero, y
como atraerlo y conservarlo:
- Los
ancianos sabios aconsejan que se conserve un billete durante todo el año. Éste
billete está cargado con energía positiva y por lo tanto empezará a atraer más
dinero hacia ti.
- Para que
haya siempre dinero en casa, hay que poner la escoba con el mango hacia abajo.
- En el
día del pago de tu sueldo, no se debe gastar ni un solo peso y toda la suma
recibida tiene que pasar una noche en casa o en tu cuenta bancaria.
- Es
preferible pedir aumento de sueldo al medio día, porque es cuando el sol
irradia su máxima energía.
- Si le
das pan y sal a alguien, tu suerte pasará a la familia de esa persona.
- Si se ponen a silbar con la boca en
la habitación no recibirán dinero extra y tampoco si recogen migas de la mesa
con la mano.
- No
prestes dinero los lunes, ni pidas prestado los martes, ni tampoco devuelvas lo
que se te prestó los días viernes.
- Toma y da prestado en la mañana, porque
cualquier manejo de dinero en la noche significa: la bancarrota.
- En
general trata de no pedir prestado sino más bien de prestar, así estarás
programando al dinero para que siempre regrese a donde tú estás.
- En el
bolsillo de la ropa donde guardas el dinero ten siempre un billete ó moneda.
Por cierto al dinero no le gustan los "bolsillos rotos".
Por cierto al dinero no le gustan los "bolsillos rotos".
- Tu
billetera nunca debe estar vacía, allí tiene que haber por lo menos una moneda.
- Todos
los billetes tienen que ponerse con la cara viendo hacia afuera, hacia donde
esté su dueño.
- En la
separación más chica de tu billetera pon un billete de 1 Dólar ó su equivalente
doblado en forma de triángulo.
- Conserva en tu billetera una “Moneda
Feliz” de tu primer sueldo, de una persona buena ó de un trato exitoso. Ésta
moneda no debe ser gastada ya que es un “talismán”, sino el dinero se sentirá
como despreciado y no regresará.
- El dinero obtenido en juegos, apuestas,
de manera injusta, encontrado ó regalado, no trae la felicidad y por lo tanto
no tiene que conservarse por mucho tiempo; gástalo rápido ó dónalo a la
caridad.
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